Hoy, seguimos disfrutando de los encantos de Euskadi con una parada en Laguardia. ¿Has estado alguna vez? Este minicipio de la Rioja Alavesa tiene un entorno único y es muy conocido por sus bodegas y excelentes vinos. ¿Te vienes a visitarlo? ¡Te encantará!

Historia de Laguardia

La villa de Laguardia se encuentra en la provincia de Álava y es la capital de la Rioja Alavesa. Fue fundada en el siglo X como defensa del Reino de Navarra y conserva casi intacto su estética medieval. Por ello, nos encontramos ante un municipio amurallado compuesto por estrechas calles de piedra empinadas, grandes puertas de acceso y restos medievales, renacentistas, barrocos y neoclásicos. Prueba de esto son monumentos como las iglesias fortificadas de San Juan Bautista y la de Santa María de los Reyes. También, destacada el edificio civil más antiguo de la villa, la Casa de la Primicia, que data del siglo XIV. Y la espectacular atalaya de “El Collao”. 

A las afueras de Laguardia también puedes visitar el yacimiento arqueológico de la Hoya. Los estudios  realizados dicen que la zona estuvo acupada por el hombre  hace más de 3.400 años.  Fue un importante centro comercial en la Edad de Bronce. Actualmente, podrás visitar el museo ubicado al lado del yacimiento donde se conservan gran cantidad de materiales y objetos de la época. Conoce más sobre la historia de Euskadi.

Bodegas, vinos y más

Una de las actividades favoritas de turistas que acuden a Laguardia es, la visita a su gran cantidad de bodegas y viñedos. La Rioja Alavesa es cuna del buen vino y casi todas las casas cuentan que pequeñas bodegas en su interior. El vino es el producto que ha marcado la vida de la villa por lo que, si eres un apasionado de esta bebida, es imprescindible que visites la zona y te adentres en sus innumerables bodegas, desde las más familiares hasta imponentes edificios arquitectónicos sorprendentes. Además, también podrás hacer visitas guiadas en las que expertos te contarán el proceso de producción del vino y para finalizar, podrás llevar a cabo la parte favorita de la visita: la cata de vinos. ¡Disfruta de la experiencia!

Ya lo sabes, en tu siguiente visita, no dudes en disfrutar de la Rioja Alavesa. Historia, tradición, naturaleza, enología, gastronomía…Es maravilloso seguir admirando los paisajes de Álava.